¿Por qué debemos mantener refrigeradas las vacunas?
Al refrigerar las vacunas, estamos manteniendo la cadena de frío, conocido como el proceso de conservación, manejo, transporte y distribución de las vacunas durante toda su vida útil. La finalidad de este proceso es asegurar que las vacunas sean conservadas debidamente dentro de los rangos de temperatura establecidos (entre 2 y 8ºc) para que no pierdan su poder inmunológico. Dada la termo labilidad de las vacunas, siempre deben almacenarse en refrigeradores donde se conservarán a la temperatura adecuada hasta el momento de su utilización.
Para asegurar que las vacunas proporcionen los beneficios esperados a las mascotas que reciben una inmunización, es fundamental que chequees las vacunas se hayan mantenido refrigeradas. De lo contrario, se corre el riesgo de volverse inocuas y proveer la falsa ilusión de que protegerán a tu mascota. Por ello, al momento de vacunar a tu mascota, asegúrate de hacerlo con un Médico Veterinario y en un espacio físico adecuado para ello. Las y los invitamos a ser unos tutores responsables y promover el autocuidado y el de nuestras mascotas, ya que así también estarás protegiendo a los miembros de tu familia y la comunidad.